Con una única representación el 22 de noviembre, llega hasta el Palacio de Congresos de la Expo Aida, una de las óperas más representadas en todo el mundo. Esta ópera de cuatro actos creada por el genial Giuseppe Verdi con motivo de la inauguración del Canal de Suez, y fue estrenada un 24 de diciembre en 1871 en el Teatro de la Ópera de El Cairo.
Ambientada en el majestuoso Egipto faraónico, la ópera narra la historia de amor entre una princesa etíope que está esclava en Egipto y que se llama Aída, y un militar egipcio que es comandante de las tropas que ocuparon la patria de la princesa y que se llama Radamés.
A esta historia de amor imposible se oponen el rey de Etiopía y padre de Aída, Amonasro, y la hija del faraón, Amneris, que también ama al militar egipcio.
Algunos aguantamos hasta el descanso. El recinto no es adecuado para representaciones de ópera. Desde la 1ª escena hasta el descanso (el resto no lo “disgustamos”) el espectáculo fue nefasto, “inenarrable” Radamés, Aída se salvaba, la dirección escénica decepcionante, los “bailadores” y la coreografía para no olvidarlos en la vida y así todo, una gala lamentable
La verdad es que es una constante en las últimas representaciones que llegan a Zaragoza. Una pena, provocada probablemente por la falta de un escenario adecuado, y sobre todo, de una temporada estable y de calidad como tienen otras ciudades, incluso más pequeñas que Zaragoza.